20 de enero de 2012

Cherrybomb.


 Cherrybomb es una película que he visto recientemente, una y otra vez.

Trata sobre dos adolescentes que son muy amigos, a pesar de la diferente clase social. Estos dos amigos, Malachy McKinney (Rupert Grint) y Luke (Robert Sheenan) tienen dos vidas muy distintas.

Malachy vive con sus padres, y éstos creen que es un estudiante modelo, a juzgar por sus buenas notas. Pero éstos no saben a qué se dedica su hijo cuando sale.
Malachy parece ser un chico muy responsable, sobretodo porque tiene un trabajo. Trabaja en un centro deportivo llamado Titanic.

Luke es el hermano menor de la familia, que vive una complicada situación. El padre de Luke es un drogadicto y camello que siempre está metido en líos. Su hermano, es empresario, pero también se ocupa de controlar la droga que el padre vende y a cambio les ofrece un techo.
Se ve que este ambiente no es bueno para Luke y él también termina vendiendo drogas.

                                                                                                                                   
                                                                             
Las drogas, el alcohol y las fiestas es lo que tienen en común estos dos personajes.

Pero estás vidas se ven afectadas cuando la deslumbrante Michelle (hija del director de Titanic) se cruza en su camino.

Aunque al principio pueda parecerlo, la vida de Michelle tampoco es fácil. Su madre ha decidido que no quiere que su hija viva con ella, que no la trae más que problemas. Por eso Michelle pasa a vivir con su padre. Esto no sería un problema, si su padre no estuviera acostándose con una amiga de Michelle. La convivencia no es fácil.

Desde el principio se crea una competitividad entre Malachy y Luke para ver quién es capaz de acostarse con ella primero.
Comienzan a jugar.
Si uno ataca a un policía para impresionarla, el otro deberá hacer algo aún más loco para conseguir que Michelle se fije en él.
Así discurre la mayoría de la película. Ella juega con ellos, les pone a prueba y a cada uno de ellos les hace pensar que ha ganado, dejándose seducir por ellos.

Durante toda la historia los dos protagonistas van cometiendo locuras, mientras se divierten. Aunque no todo es diversión. Esta rivalidad está haciendo que Malachy y Luke vayan perdiendo su amistad, aunque puede que algo, les haga recuperarla.

Pero todo esto se ve alterado cuando Michelle ha de marcharse de la ciudad. Esa misma noche deciden colarse en el centro deportivo y hacer la mayor fiesta nunca vista.


Alcohol, drogas, música a todo volumen, sprays y fuegos artificiales. La combinación fatal.

Pasa toda la noche y cuando la fiesta termina, se duermen.
Todos, dentro del centro.
Al día siguiente el padre de Michelle (director de Titanic) se dirige al trabajo y ve lo que ha ocurrido esa noche. Se encuentra a su hija, a Malachy, a Luke y a todos los demás, drogados y durmiendo.

A éste no le hace ni pizca de gracia. Y cómo podéis imaginar se lía la de Dios.
Dave (padre de Michelle) la saca del agua, ella intenta explicarse, pero su padre, encolerizado, le arrea un manotazo. Malachy acude en su ayuda, pero Dave, la toma con él y le da una paliza.
Luke, en un intento socorrido de ayudar a su amigo, golpea a Dave con una vara de hierro, en la cabeza, haciendo así que deje de respirar.



La historia, se cuenta desde un calabozo, desde el cual, Luke y Malachy, acusados de asesinato, cuentan su versión de los echos.


~ Opinión personal ~

En mi opinión, esta película refleja el ambiente adolescente desde otro punto. Desde un punto de vista más maduro. Desde un punto de vista, menos... Menos, High School Musical y todas esas películas irreales.
Esta película muestra también algunos aspectos importantes, que a veces los adolescentes olvidamos por completo:

- No dejarse embaucar por la primera persona que aparece.
- No permitir que nadie te haga perder tu amistad con otra persona.
- Y sobretodo, los amigos primero.





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