19 de febrero de 2012

Capítulo 9 "Él, yo, nosotros y los demás"


En mi mente ya no cabían más preguntas. ¿Qué clase de mal sueño era este?

Era increíble. Con menudos personajes me he ido a juntar, pensé.

Uno de ellos es demasiado sexy pero también muy dulce. Su sonrisa, con esos preciosos hoyuelos. Sus ojos, a veces verdes, a veces azules. Unos ojos, que solo con mirarte te hacen sentir la persona mas improtante del mundo.  Su pelo, que le tapa a veces le tapa parte de la frente, que le cae hacia los ojos, y que hace que mirarle fijamente sea mucho más interesante.          
Una voz, que solo con escucharla, tus problemas parecen desaparecer. Unas manos, firmes, pero dulces y muy suaves. Y unos besos que hacen que te sientas única.

El otro, tan gracioso como para hacer bromas aunque le acaben de dar una puñalada. Es una persona que siempre te hace reír, aunque no quieras. Con él ríes, siempre. Su mirada te hace enloquecer. Su, cuerpo... La forma en la que se recoge con la mano, la media melena que se le viene sobre la cara cuando hace alguna tontería... Sus dientes, hipnóticos. Además de todo eso, es uno de mis ídolos. Los ídolos siempre tienen una atracción especial, ¿no?

Un momento... ¿Qué me está pasando? ¿Qué es lo que se supone que estoy haciendo? ¿Qué se supone que estoy sintiendo por Tom? ¿Esto normal?

-No. No, no y no. - Pensé.

Es a Rupert a quien quiero. No voy a permitir que nada de esto cambie. Rupert y yo nos queremos y punto. Él me hace sentir como nunca me había sentido. Me hace sentir viva.

Aunque por otra parte. ¿Cómo podía decir que nos queríamos? No nos conocemos de nada. Yo no sabía nada de él y él sabía aún menos de mi.
No podía evitar pensar en un montón de preguntas que no tenían respuesta aparente: ¿Siente él por mi lo mismo que yo por él? ¿De qué forma me quiere? ¿Piensa él que esto va a durar? ¿Qué esto está bien?

Era muy extraño. A pesar de que no nos conocíamos de nada yo sentía que nos conocíamos lo suficiente como para compartir el resto de nuestra vida.

Estaba preocupada. ¿Y si lo estropeaba todo? Y si cometía un error y me dejaba llevar. Nunca me lo perdonaría.
- Quiero a Rupert con toda mi alma. - Me repetía a mi misma una y otra vez. Pero no podía evitar sentir algo por Tom, algo que me hacía dudar.

Tenía que dejar de pensar en eso. Si no no iba a conseguir dormirme.

1 comentario:

  1. Perdonad por haber subido un capítulo tan corto, pero es que se me está haciendo difícil continuar con la historia... Cada vez se pone más interesante y no sé como seguirla. Intentaré que el próximo capítulo sea más largo e interesante.

    ResponderEliminar